Se trata de un libro maldito para aquellos que deseen iniciarse en el estudio e investigación de distintos fenómenos paranormales. Melissa Martin Ellis, su autora, pertenece a esta rara estirpe dedetectives paranormales, lo cual le permite brindar información muy valiosa para este tipo de pesquisas.
Resulta redundante afirmar que los cazadores de fantasmas no son precisamente proclives al escepticismo.
101 formas de encontrar un fantasma no es una excepción. En ningún momento se cuestiona la posibilidad de que los fenómenos paranormales que estudia tengan un origen más amigable con la ciencia y no tanto con el espiritismo.
No obstante, resulta interesante como guía para clasificar distintos eventos sobrenaturales. Por ejemplo, qué hacen los fantasmas cuando no están entre nosotros.
Melissa Martin Ellis elabora una teoría que no es del todo original. Los fantasmas -sostiene- no se involucran directamente en el mundo de los vivos, sino que su propia realidad se entrelaza con la nuestra, permitiéndonos conocer fugazmente algunas de sus características.
Por ejemplo, cuando un fantasma atraviesa una pared, algo que hemos visto en incontables películas, en realidad está atravesando por un sitio en el que antiguamente había una puerta, o cualquier otro tipo de abertura. En este contexto, los fantasmas son muy respetuosos de la arquitectura en la cual vivieron.
101 formas de encontrar un fantasma permite realizar investigaciones sencillas, al menos en apariencia, y determinar si en nuestra propia casa habita algún espectro del más allá.
Acto seguido, el libro trata de certificar que esas experiencias se correspondan conactividades paranormales reales, y no producto de la imaginación.
Finalmente se ofrece una serie de ejercicios que le permiten al investigador comunicarse con los fantasmas que ha descubierto, desde luego, sin utilizar herramientas peligrosas, como pueden serlo el tablero Ouija o el Juego de la copa.
Resulta redundante afirmar que los cazadores de fantasmas no son precisamente proclives al escepticismo.
101 formas de encontrar un fantasma no es una excepción. En ningún momento se cuestiona la posibilidad de que los fenómenos paranormales que estudia tengan un origen más amigable con la ciencia y no tanto con el espiritismo.
No obstante, resulta interesante como guía para clasificar distintos eventos sobrenaturales. Por ejemplo, qué hacen los fantasmas cuando no están entre nosotros.
Melissa Martin Ellis elabora una teoría que no es del todo original. Los fantasmas -sostiene- no se involucran directamente en el mundo de los vivos, sino que su propia realidad se entrelaza con la nuestra, permitiéndonos conocer fugazmente algunas de sus características.
Por ejemplo, cuando un fantasma atraviesa una pared, algo que hemos visto en incontables películas, en realidad está atravesando por un sitio en el que antiguamente había una puerta, o cualquier otro tipo de abertura. En este contexto, los fantasmas son muy respetuosos de la arquitectura en la cual vivieron.
101 formas de encontrar un fantasma permite realizar investigaciones sencillas, al menos en apariencia, y determinar si en nuestra propia casa habita algún espectro del más allá.
Acto seguido, el libro trata de certificar que esas experiencias se correspondan conactividades paranormales reales, y no producto de la imaginación.
Finalmente se ofrece una serie de ejercicios que le permiten al investigador comunicarse con los fantasmas que ha descubierto, desde luego, sin utilizar herramientas peligrosas, como pueden serlo el tablero Ouija o el Juego de la copa.
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